¿EL VACÍO LLENA EN FENG SHUI?
En Feng Shui hacer vacío es deshacerte de todas aquellas cosas materiales que has ido acumulando a lo largo de tu vida y que ya no le das utilidad, está estropeado, no te gusta o te trae malos recuerdos.
El vacío es el primer paso para equilibrar las energías de tu casa, no servirá de nada aplicar curas si antes no has hecho un buen vacío.
El vacío podríamos asemejarlo a preparar la tierra que vas a cultivar.
A nadie se le ocurriría plantar en una tierra dura y estéril, llena de rastrojos y naturaleza muerta.
Primero se haría una limpieza de todo lo que no sirve y está desgastando la energía de la tierra, para luego poder abonar y plantar sobre el terreno preparado.
Eso mismo es lo que tenemos que hacer con nuestra casa, liberar y limpiarla de todo aquello que está desgastando su energía y la nuestra, sin dar ningún fruto a cambio.
Es la tarea más ardua y pesada en un estudio de Feng Shui, cuesta mucho deshacer esos vínculos y apegos que las personas tenemos con esos objetos materiales que guardamos de una forma absurda.
La buena noticia es que cuando empiezas, si te lo tomas en serio, enseguida se obtienen resultados, nos sentimos liberados y comienzan a llegar cosas nuevas, porque no olvides que a la naturaleza no le gusta el vacío y esos huecos que dejamos al deshacernos de todo a lo que ya no le damos utilidad, serán puertas abiertas para que cosas nuevas lleguen a nuestra vida, con nuevas oportunidades y vivencias.
En el vacío de una vivienda han de participar todos los habitantes, cada uno tiene que aportar su granito de arena y entre todos será más fácil y divertido.
Se pueden separar en cuatro grupos:
- Lo que vamos a regalar porque sabemos que a alguien que conocemos le gusta y le hará mucha ilusión que se lo demos.
- Lo que vamos a donar, porque sabemos que son cosas que sabes que son necesarias y que alguien le puede sacar provecho.
- Lo que vamos a vender, porque son objetos que son más capricho que otra cosa y que alguien lo va a poder adquirir por bastante menos de su precio habitual y va a ser feliz.
- Lo que vamos a tirar, porque ya no se puede aprovechar y vamos a deshacernos de esas cosas de la forma más respetuosa con el medio ambiente y la naturaleza, en puntos de reciclado.
Cualquiera de esas cuatro acciones son positivas y constructivas y siempre acabamos recibiendo lo que damos, todo nos viene de vuelta.
Cuando hay niños en la casa siempre aconsejo que sean ellos los que elijan que es de lo que se quieren deshacer, explicarles que hay niños que no tienen tanta suerte como ellos y que apenas tienen juguetes y que esos juguetes que ellos tienen ahí y que ya no usan, pueden hacer muy feliz a otro niño.
Ir con ellos a entregarlos a una asociación y luego como premio ir a donde ellos elijan, un parque de bolas, cine, playa, etc.
Cuando en una casa se decide hacer vacío también es conveniente poner una hucha, caja, bote, lo que se quiera, donde ir metiendo el dinero que se va recogiendo de lo que se vende y decidir entre todos que se va a hacer con ese dinero, es un buen aliciente, te lo aseguro.
Cuando hacemos vacío, podemos colocar mejor aquellas cosas que si usamos, ordenar se convierte en una tarea mucho más fácil.
Hacer vacío nos aporta la sensación de habernos aligerado, de haber soltado lastre, en los armarios y espacios se nota una energía mucho más relajada, más tranquila y limpia, que hace que en nuestro hogar todo fluya con más equilibrio.
Todo son ventajas cuando hacemos vacío, así que no te lo pienses más y ponte….
¡manos a la obra!
Te voy a contar un secreto, a mi lo que más me cuesta es hacer limpia de calcetines, sobre todo esos gordotes de estar por casa jajaja, no sé porque, pero me encantan y siempre tengo que hacer un esfuerzo para tirar los viejos.
¿Y a ti? ¿Qué es de lo que más te cuesta deshacerte? Cuéntamelo y comentamos.
¡Feliz camino!